martes, junio 26, 2012

Viajando en bus (10) - Conclusión

El periplo terrestre de aproximadamente 11,000 kilómetros nos ha permitido aprender mucho sobre nuestros pueblos, nos ha permitido "sentirlos" de cerca, nos ha permitido comprobar que tenemos mucho en común.

La empresa de transporte internacional que hizo posible esta fascinante excursión se llama Caracol, organización que recomiendo por su gran profesionalismo. Replico el texto que muestra en su página "vendiendo" la idea del viaje de forma comprobadamente certera:

La hermandad de nuestros pueblos, el legado de nuestros antepasados y la vasta riqueza natural con la que contamos hacen de este lado del continente el mejor motivo para unirnos. América del Sur se caracteriza por ser tan similar, pero a la vez tan distinta.

Sin embargo, usted se ha puesto a pensar cuántas veces en su vida podrá realmente conocer el corazón de América del sur. Particularmente, coincidimos que no existe una mejor forma de conocerlo que simplemente recorriéndolo, viviéndolo, sintiéndolo, pero sobretodo, disfrutándolo.

¿Ha pensado realmente cuánto conoce de aquellos pueblos que parecen tan parecidos, pero que en realidad son tan distintos? ¿Conoce usted el porqué nuestros vecinos de occidente recorren largas distancias para conocer un pueblo latinoamericano? ¿Considera usted que ya es hora de tomarse un descanso y dejarse llevar por la naturaleza de nuestra hermosa tierra?

Si su respuesta es la que imaginamos, lo esperamos. Tenemos un hermoso camino por recorrer. Nos vemos en el bus.
El idioma común que hablamos y la historia de los últimos cinco siglos reafirma nuestra idea de que somos en realidad (o deberíamos ser) una sola patria, porque como dice Rubén Blades en una de sus canciones "Compartimos una luna, una fé y una memoria".  Tenemos problemáticas comunes, sueños comunes, sentimientos comunes y frustraciones comunes. Por ejemplo, un hecho tan superficial como el siguiente nos puede llevar a reflexiones más profundas: todos los países de América Latina pregonan que su himno nacional es el segundo más hermoso del mundo.

Conocer América Latina garantiza emoción. Conocer América de este modo garantiza además amistades que proseguirán activas luego de concluido el viaje.

Para los amantes de la cultura y de la exploración de otras realidades este viaje es una experiencia encarecidamente recomendada. ¡Disfrutad América!

Miscelánea:
Pincelada sobre América Latina

viernes, junio 22, 2012

Viajando en bus (9) - Perú (retorno): alturas y paisajes

El día 31 de octubre de 2011, a eso de las 4:30 de la tarde estábamos ya de regreso en "casa", vía Desaguadero. Hay una cierta emoción de sentirse nacional luego de haber estado de visitante en tantas ciudades de afuera. Al abogar para que a unas compañeras de viaje colombianas mayores y con malestar por la altura las atiendan preferencialmente nos sentimos como anfitriones. "¡Claro, ya estás en tu país!" nos dice otra coviajera.

Ingreso al Perú (desde Bolivia)

Luego de los trámites de migración y cambio de moneda correspondientes subimos nuevamente al bus para emprender, esta vez, el viaje a Puno. El malestar por la altura va comenzando sus efectos.

Al fondo el lago Titicaca

Llegando al centro de Puno fijamos el punto de reunión próximo en un restaurante peña. Para esto hemos de atravesar una calle que está tan abarrotada de gente que para no perdernos de vista caminamos con los brazos en alto. No nos imaginábamos que en Puno celebraban con tanta efervescencia la Noche de Brujas importada.

Noche del 31 de octubre en calle céntrica de Puno

Danza puneña

Catedral de Puno

Terminada la cena en el restaurante y luego de la sobremesa y de unas pocas fotos en la Plaza de Armas emprendemos viaje a Cusco durante toda la noche. Llegaremos a la ciudad de Cusco alrededor de las 6:00 de la mañana. Vendrá el desayuno en el hotel donde parte del grupo quedará alojado y otros continuaremos, tras un recorrido libre por la ciudad, viaje rumbo a Lima. De más está decir que Cusco es mágico.

Polémico monumento a Inca en Cusco

Iglesia de la Compañía

Piedra de los Doce Ángulos

Vista panorámica de Cusco

El paisaje que veremos en la ruta hacia Abancay será muy bello, por eso la recomiendo encarecidamente para los viajeros que deseen rutas espectaculares. La carretera está en excelente estado y es extremadamente divertido viajar por ese trayecto (el desvío a Choquequirao está en esa ruta).

Carretera (de Cusco hacia Abancay)

Abancay desde las alturas

Después de pasar por Abancay el viaje prosigue con los gratos paisajes. El almuerzo es tomado en un hotel que está cerca a Chalhuanca cuando ya el hambre apremia, puesto que ya es un poco tarde.

Luego del "almuerzo de camaradería" proseguiremos hacia Nazca. Tras unas horas la noche nos irá ganando y el paisaje se irá volviendo árido. Pero las curvas continuarán y el manejo se tendrá que hacer con cuidado: la ruta que llega hasta Nazca es más complicada que la Carretera Central (supongo que el descenso de la Cordillera de los Andes está influido por la falla de Nazca en esta región). Ya en la ciudad de Nazca tendremos la última parada para cenar algo más o menos rápido. Toda la noche viajaremos por la Carretera Panamericana, llegando a Lima hacia las 6:00 de la mañana.

Bello hotel Tampumayu cerca de Chalhuanca

Vista panorámica de la carretera

Sigue atardeciendo (hacia Nazca)

La llegada al distrito de Miraflores nos genera la pena del fin del periplo de 19 días. La aventura ha concluído. La despedida de nuestros compañeros de viaje es un poco triste pero sabemos que el contacto se mantendrá. Como contraposición, la pronta llegada a casa nos entusiasma, el calor del hogar nos espera.

{Viene ----> Capítulo 10: Conclusión}

martes, junio 12, 2012

Viajando en bus (8) - Bolivia: cambas y collas

Bolivia es un país complicado, y esto se aprecia desde el mismo momento en el que uno va a ingresar a su territorio. La buena pista que comienza desde la misma frontera con Paraguay está cerrada (aún) al tránsito, sea por trámites burocráticos o por oposición de las comunidades campesinas regionales. El hecho es que el bus tuvo que circular un buen trecho por la vía afirmada que corre paralela a la carretera.

Ingresando a Bolivia (desde Paraguay)

Control sanitario
El trámite migratorio se efectúa en una oficina-casa que está ubicada en la difícil zona del Chaco seco boliviano. Se puede observar que los funcionarios que atienden allí la tienen verdaderamente complicada puesto que parece que hacen malabares para lidiar con las carencias físicas que impone la dificultad infraestructural y logística.

Llegando al puesto de control migratorio

Tramitando sellos en pasaportes
Luego de recorrer el trayecto afirmado el resto del camino se hace en unas muy buenas carreteras, lo que nos permite llegar a Santa Cruz de la Sierra alrededor de la medianoche para el muy deseado descanso en el hotel Arenal.

Una calle en Santa Cruz de la Sierra
Santa Cruz de la Sierra se nos muestra como una ciudad serena o apacible. Recorremos brevemente los alrededores del hotel y lo vemos con su tránsito, sus negocios y el caminar de su gente.

A media mañana salimos de Santa Cruz y fijamos como destino Cochabamba. El paisaje del camino será similar a la ceja de selva peruana. Antes del almuerzo nos encontramos con dificultades: la población mantiene bloqueada la carretera en desacuerdo con la construcción de una vía que atraviesa zonas agrícolas. Esto nos obliga a dar una media vuelta para buscar un "restaurante de emergencia" puesto que ya el hambre arrecia. Tras unos pocos kilómetros -en reversa- llegamos al restaurante "El moderno" donde  pedimos "lo que sea" (resulta ser pollo al spiedo y una coca-cola).

Disfrutando en el río como en la playa

Bloqueo en carretera
Después de algunas horas de espera, y tras negociaciones entre los protestantes y el gobierno (o la policía) el tránsito es reabierto. Es otro día en el que llegamos con ansias al hotel para el descanso correspondiente.

Divisando Cochabamba

Cochabamba

Niñas al interior de iglesia
El paseo central en Cochabamba será la visita al Cristo de la Concordia utilizando un teleférico que tiene cabinas para seis personas. Desde este mirador la vista de la ciudad es impresionante y muestra lo grande que es Cochabamba.

Laguna Alalay resaltando en Cochabamba

Cristo de la Concordia
Al regreso para el almuerzo fuimos a un restaurante-buffet, donde lamentablemente algunos platos ya se habían acabado, pero encontramos de todos modos una muestra de la gastronomía cochabambina, con su cerveza más (marca Huari).

Una tarde en la ciudad nos permitió conocer también un centro comercial donde fuimos al cine. No hay nada que hacer, estos lugares son iguales en todas partes: tiendas, cines, comida rápida, cajeros, diversiones para niños.

Plato de fiesta: bicentenario
Después de nuestra última noche de hotel en Cochabamba ya no tendríamos más que pernoctes en el bus. Así que retiradas nuestras maletas del alojamiento éstas quedarán en el vehículo hasta la llegada a Lima. Emprendemos la ruta entonces. El almuerzo será en el camino, atravesando El Alto al comenzar la tarde, parando en Tiahuanaco en plena tarde y retratando el Titicaca hacia el final vespertino. Hemos disfrutado mucho el paisaje del altiplano boliviano, y en general, hemos tenido una visión rápida muy enriquecedora de esta nación. ¡Chau Bolivia, gracias por mostrarnos tus caminos!

Desorden en El Alto

Tiahuanaco

Lago Titicaca

El lago Titicaca un poco más tarde


AQUI CONTINÚA LA CRÓNICA