lunes, marzo 26, 2012

La política naufragó en estos días

Después de muchas lunas el presidente Humala respondió a todos los temas que merecían un pronunciamiento. Esto lo hizo en el programa Panorama. Ya habrá mucho por leer al respecto en los análisis que vendrán por parte de los periodistas en la semana que comienza mañana.

Uno de los temas al que se refirió fue el caso de la fragata británica que no llegó a puerto peruano. Ya que este tema ha sido uno que ha estado en el candelero estos últimos días en la prensa y en las redes sociales me parece interesante emitir unas pequeñas apreciaciones.

En primer lugar me parece de una torpeza tonta (tal vez existen torpezas a secas) el asunto de la autorización del ingreso de la nave a aguas peruanas. Si bien la fragata no es de bandera malvinense sí es una mala época para este tipo de ejercicios en alguna de las costas sudamericanas. Entonces, eso de autorizar-desautorizar es un papelón de mal gusto por parte del Estado Peruano que se supone tiene una política exterior definida (no importando si lo indica hacia afuera el Congreso o el Poder Ejecutivo). Alguien debería ser responsabilizado por este tipo de manejo. El problema en este país es que muchos desaciertos quedan 'así nomás'.

En segundo lugar, el tema de fondo es que hay un apoyo de UNASUR a la causa argentina, tal como se acordó en la reunión de Asunción, por lo que acá no hay lugar a dudas. Como este asunto debía ser conocido por Inglaterra la intención de hacer ejercicios militares en costas peruanas aparentemente tenía 'su más y su menos' como declara el congresista Víctor Andrés Belaúnde.

Esto último da pie para mencionar en tercer lugar que me parecen insolentes los comunicados de prensa que da la Embajada Británica en el Perú. El gobierno británico sabe absolutamente del apoyo sudamericano a la causa argentina y sabía perfectamente entonces que el periplo de su barco era inapropiado en esta oportunidad. En todo caso, su incomodidad por la invitación-desinvitación debió manejarse por canales internos del nivel diplomático.

Como comentarios adicionales creo que habría que mencionarse que es francamente penoso leer o escuchar comentarios de muchos peruanos que anteponen sus antipatías ideológicas (a Cristina Fernández y amigos) a las convicciones solidarias (que se supone deberían tener) frente a un país vecino continental. El único argumento que arguye la gente perteneciente a la DBA (suelen estar en este grupo inculto) es que 'Argentina le vendió armas a Ecuador' cuando este último estaba en conflicto con el Perú. No dicen nada (o no saben o se quieren olvidar) de que Inglaterra estuvo detrás del negocio del salitre, que fue origen de la Guerra del Pacífico. La ruindad del sector más conservador del país, como ha sucedido siempre -en la misma Guerra del Pacífico era similar- siempre ha dirigido sus estrategias. En un caso como éste por ejemplo le tendrían más respeto a un extranjero (al embajador británico, al canciller inglés, etc.) que a un connacional que no tenga ideas políticas similares.

sábado, marzo 03, 2012

Viajando en bus (5) - Uruguay: placidez y belleza

Durante la estadía en Buenos Aires un día fue elegido para cruzar -vía el Río de la Plata- hacia la ciudad uruguaya de Colonia de Sacramento. Ese día muy temprano salimos del hotel para ser llevados por el bus hasta Puerto Madero. Desde allí abordamos el catamarán que nos llevaría a la otra orilla. Luego de estar instalados en nuestros asientos la nave procede a moverse lentamente desde el muelle y va avanzando hasta salir hacia aguas libres, donde coge más velocidad finalmente para emprender el viaje. Éste nos demora aproximadamente 1h20m y el trayecto es algo turbulento puesto que vamos contra la corriente del río (para todos los efectos es como un océano dado el ancho). La nave se bambolea algo hacia arriba-abajo y menos hacia derecha-izquierda pero es una sensación incómoda ya que a muchos les produce mareos (una tripulante va repartiendo bolsas pequeñas a quienes las solicitan). Algunas personas van hacia la proa para tener un panorama amplio pero deben caminar con mucho equilibrio para no caerse. Tras una hora más o menos de viaje se avistan los primeros elementos en la orilla uruguaya. Crece la expectativa. Finalmente ingresamos al puerto uruguayo y después lentamente y de manera lateral nos acercamos al muelle para que las amarras sean colocadas en la nave. Ya detenida la nave bajamos: ya estamos en el "riopuerto".

El interior del catamarán

Desde acá saldremos a caminar con la guía local por la zona histórica de la ciudad. Inmediatamente la ciudad nos da una impresión de tranquilidad y buena calidad de vida. Se nota que el nivel cultural de los uruguayos es alto y la belleza de las uruguayas impactante.

Una calle con encantadores árboles

En la zona histórica encontramos antiguas casas y edificios, calles empedradas, viejos árboles, un faro, automóviles antiguos y todo un ambiente de sosiego familiar único. Ciertamente es un lugar preciso como para pasar unos días perfectos de relax. Todo acompañado de cafés, restaurantes, museos y tiendas de souvenirs. Un encanto.

Patrimonio de la humanidad

Tras la caminata turística nos toca ir a almorzar. El tour incluía el almuerzo y nos sólo toca elegir el plato de la carta, que en mi caso es un "finito de carne con fritas". Me pido también una jarrita de vino rosé uruguayo. Luego del almuerzo tenemos alrededor de una hora para visitar una feria de souvenirs. Cumplido todo el recorrido en la ciudad nos toca llegar al terminal donde habremos de abordar el catamarán para regresar a Buenos Aires. El viaje de retorno dura alrededor de 45 minutos. Esto se debe a que ahora vamos a favor de la corriente. El regreso por tanto es más tranquilo.

Restaurante La Pasiva

Las fotografías que incluyo creo que pueden ayudar a redondear la gran impresión que me causó esta bonita y plácida ciudad.

Empedrado original de la época de los portugueses

Colonia de Sacramento es una ciudad especial también en el aspecto histórico puesto que fue el único enclave que alguna vez tuvieron los portugueses en el Río de la Plata. Más tarde esta ciudad pasó a manos españolas, tras controversias, guerras y tratados.



AQUI CONTINÚA LA CRÓNICA

Más sobre Colonia de Sacramento: Wikipedia / Intendencia de Colonia / Turismo en Uruguay